La resaca del ralente cubre de un baño húemedo todo aquello expuesto al exterior´
Aquí dentro, en mi estudio, reina el calor, y en un vaso próximo reposan los restos de una bebida que me acompaña.
Mis ojos leen, y mi cuerpo sueña.
Y mi sexo también se cubre de un manto húemedo de perverso deseo.
Y te pienso, te imagino, te beso, te desnudo a medias, arrugo tu ropa, descubro tus hombros y arrugo tu falda....
Y te percibo, te manoseo, y siento el calor en mis ejillas rosadas por la pasión.
A pesar de todo, me sigo humedeciendo, y siento herviren el interior de mis venas la sangre que recorre mi sexo.
Te busco, te pienso, te deseo, te rozo, te tengo
Aquí dentro, en mi estudio, reina el calor, y en un vaso próximo reposan los restos de una bebida que me acompaña.
Mis ojos leen, y mi cuerpo sueña.
Y mi sexo también se cubre de un manto húemedo de perverso deseo.
Y te pienso, te imagino, te beso, te desnudo a medias, arrugo tu ropa, descubro tus hombros y arrugo tu falda....
Y te percibo, te manoseo, y siento el calor en mis ejillas rosadas por la pasión.
A pesar de todo, me sigo humedeciendo, y siento herviren el interior de mis venas la sangre que recorre mi sexo.
Te busco, te pienso, te deseo, te rozo, te tengo
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